Tandil, camino a la ciudad gourmet
Cerquita de Buenos Aires, la tierra de las sierras y las carreras de aventura, del descanso y los chacinados, afianza su impronta gastronómica maridando productos regionales, cocina en vivo, solidaridad y negocios. Todo, en el marco de una fiesta que promete disfrutarse con los cinco sentidos.
Cerveza artesanal, licor, vino y vermuth; pastas caseras, fermentos, té, mermeladas, snacks de frutas, gírgolas frescas, verduras hidropónicas y quesos veganos, son algunos de los productos locales que, junto a cocineros y la maquinaria de la gastronomía tandilense, esperan en el Mercado Gastronómico. De estreno en el marco de la tradicional Semana Gastronómica, este nuevo encuadre promete sembrar las bases de una cooperación entre los distintos actores del vasto mundo alimenticio. La inauguración será el viernes 15 a las 20 en el Club Atlético y Biblioteca Ferrocarril Sud (Avenida Colón y Arana), y durará hasta el domingo 17. “Cada año la Semana Gastronómica intenta sumar actividades. En esta oportunidad, habrá cocina en vivo, expositores y un concurso de recetas regionales, además de del plato solidario sobre el cual estamos todos muy atentos, ya que se trata de una donación de los restaurantes de la ciudad al Banco de Alimentos de Tandil. Así que cada vez que un cliente pida el plato elegido a tal fin en el menú, la plata irá a ese fondo solidario”, cuenta Mario Wisner, Secretario de la Asociación Hotelera Gastronómica de Tandil. Charlas, catas y degustaciones, y una barra de tragos, prometen completar un panorama donde habrá mucho para aprender y recorrer, además de saborear.
Vieja conocida
No es nueva la impronta gastronómica que también envuelve a Tandil. Estandarte nacional de los mejores quesos y chacinados, es también reconocida por muchas otras exquisiteces, desde la cerveza artesanal a la producción de dulces elaborados con frutos locales. Cada uno de esos productos llegan hoy a la mesa de los visitantes en los restaurantes locales. Basta sentarse en las coquetas mesas de Verde Vistró (@verdebistrook) y probar una carta totalmente vegetariana, en parte vegana e incluso sin TACC, para creerle a Enzo Rabe en eso de “estimular paladares”. Visitar la casa de Época de Quesos, hoy Monumento Histórico, invita a degustar los mejores quesos con y sin condimentos, rellenos y de formas curiosas. O entregarse a los platos de Tierra de Azafranes (@tierradeazafranes), una arrocería que combina toques asiáticos con especias y sabores de estos pagos. “¿Sabés que pasa? Si bien muchas ciudades están en un gran nivel o se destacan con un producto, yo veo que en Tandil tenemos, además de quesos y embutidos, lo más conocido, muchos productores grosos en las distintas ramas de la gastronomía, y eso te aporta una calidad única, que potencia mucho las posibilidades de lo que podemos cocinar. Entonces se posiciona el destino ofreciendo algo superior”, asegura Emilio Juan Pardo (@cocinerodetandil) cocinero de Calabaza.
No queda más que creerle, y acercarse a disfrutar.
Buen destino
El Banco de Alimentos Tandil (www.bat.org.ar), al que se donará el “plato solidario”, acompaña a 117 instituciones que alimentan más de 16 mil personas. En 2022 distribuyo 380 mil kilos de alimentos.
Clásicos
No puede conocerse Tandil de veras si no se hace una caminata por el Parque Independencia o se rodea el lago del dique; si no se visita la piedra movediza o el cerro Centinela (www.cerroelcentinela.com.ar); o si no se emprende el desafío de la fiesta del trail running en Cruce Tandilia (www.crucetandilia.com.ar). Todos, clásicos de un destino tan cercano como imperdible