La amiga comadreja
Un encuentro fortuito, tragicómico y por un momento aterrador, me llevó a investigar más sobre este animalito. Feo como pocos, nada sociable y con mala fama. Sin embargo, es un aliado maravilloso del ser humano.
Cierta noche oscura de invierno, medio dormida, recordé que no le había puesto comida a mi gato extramuros, el simpático vecino que duerme en el porche. Salí, y al verlo lo acaricié. En el mismo instante en que noté un pelaje áspero y desconocido me encontré cara a cara con una comadreja que robaba su comida. En una fracción de segundo las dos evaluamos a quién le daba primero un infarto, y corrimos para lados opuestos, obviamente.
Al contar lo sucedido me llovieron comentarios aterradores: “Suerte que no te mordió”, “te podría haber arañado”, “transmiten infinidad de enfermedades”, “fijate si no hizo nido en tu casa”, y otras tantas cosas. Nada más lejano a la realidad. De hecho, en Uruguay es parte de la fauna protegida, y en algunas provincias como Mendoza es valorada por su cooperación al ecosistema. Sucede que estos animales se vinculan por su apariencia con los roedores, pero no son ni parientes lejanos.
Valioso aliado anti plagas
Las comadrejas son marsupiales, no roedores, y las hembras poseen el pliegue de piel que permite albergar a su camada como los canguros. La veterinaria uruguayaDra. Gabriela Turini, miembro de “Apa El Refugio”, realizó un profundo estudio sobre esta especie: “Son marsupiales omnívoros, comen frutas y verduras, también cazan ratas, ratones y cucarachas, y un rasgo a destacar es que son importantes en el control de plagas. Parece que la mala fama le llega por los criadores de gallinas, ya que también comen huevos”, asegura. Este último dato no presenta un peligro para los clubcampistas ya que no conozco socios de countries o barrios cerrados que tengan gallineros.
Otra ventaja es su vida errante, deambulan y no tienen refugios permanentes, razón por la cual no hace nido ni se instalan en las casas. Se refugian en árboles, pero van cambiando de lugar. Poseen hábitos nocturnos, por lo que no es tan sencillo cruzárselas, y en general y lamentablemente los countristas vemos a estos animalitos ya sin vida, víctimas de los autos. En verano y en otoño es muy difícil encontrarlas, y aparecen principalmente en primavera, cuando salen a buscar pareja porque es su temporada reproductiva.
De peligros y enfermedades
Cuanto más se sabe de las comadrejas más mitos se esfuman. Quizás por su fealdad inspiran temor, pero Turini pudo comprobar que se trata de un animal “de muy buen carácter, muy fácil de manejar, sin signos de agresividad pero sí mucha paciencia, y duerme casi todo el día hasta que se activa de noche”.
Ante la cercanía del humano su primera reacción es huir, y si cree estar en peligro muestra sus dientes y un gesto de fiereza que no pasa de allí. Y si nada de esto ahuyenta a quien considera amenazante usa un arma única y especial: se hace la muerta con maestría actoral. Disminuye los latidos del corazón, pone los ojos vidriosos y la boca abierta, como toque final exuda un olor pestilente propio de un animal en descomposición. Posee gran paciencia y puede quedar en ese estado tanto tiempo como haga falta para sortear la situación. Numerosos estudiosos aseguran que no es real que puedan contagiarse y transmitir hidrofobia, ya que “tiene una curiosa temperatura corporal de 32 grados, lo que impide la permanencia y reproducción de numerosos vectores, además del beneficio extra que dispone de un alto nivel de linfocitos que le otorga sólidas defensas contra microorganismos nocivos”. Entonces, menos miedo ante este animalito, y respeto ante su utilidad al medio ambiente sin llegar a convertirlo en mascota ya que no es su naturaleza ni destino.
Muy lindas las fotos y muy interesante el artículo!! Como countrista desde hace más de 50 años, conozco la antipatía injustificada que tienen las “olorosas comadrejas”, muy injusta esta denominación, porque como se explica en el artículo, solo usan su olor como arma de defensa cuando se sienten atacadas!!! La antipatía en los countries se debe, no a las comadrejas, sino a nosotros, porque cuando ponemos la basura orgánica en formas o lugares incorrectos, la comadreja aprovecha nuestros desperdicios y, oh, sorpresa, deja nuestro entorno sucio y desprolijo!!!Como experta en rabia, tengo que comentar que como muchos animales, perros,gatos,murciélagos,zorros,vacas, etc, las comadrejas sin reservorios de virus. Por eso, hay que aceptar y respetar su lugar en la naturaleza, sin hacerles sentir la necesidad de defenderse con una peligrosa mordida!!! Felicitaciones por el artículo .